Sobre alimentación conciente

Todo lo que sucede en nuestras vidas tiene su origen en los pensamientos, y el desarrollar atención plena en el pensamiento es alcanzar la consciencia plena. También como atención plena podemos entender: poner atención deliberadamente y sin juicios en el momento presente, estar consciente de tus pensamientos, emociones y sensaciones físicas en el momento presente. Como sociedad, hemos venido desarrollando hábitos inadecuados en relación a nuestras comidas y los momentos de preparar nuestros alimentos, consumirlos y desecharlos; y esta falta de consciencia, no solo en relación a alimento sino en general, ha propiciado que nos seamos capaces de reconocer y entender los mensajes que nuestro cuerpo y nuestro corazón nos envían frecuentemente. Es importante desaprender hábitos inadecuados más arraigados.

La ciencia nos ha enseñado que somos energía y que todos los elementos del universo contienen ondas vibratorias energéticas, eso nos incluye a nosotros y los alimentos que manipulamos e ingerimos. Los alimentos son seres vivos que reaccionan a las diferentes frecuencias a las que se ven expuestos por lo que la preparación de los alimentos es de gran importancia; si al preparar los alimentos nuestros pensamientos son de enojo, miedo, oscuridad, nuestra comida absorbe estos pensamientos y las vibraciones que genera nuestro cuerpo; por otro lado si nuestros pensamientos se enfocan en los beneficios que los alimentos traen a nuestra vida con agradecimiento, el alimento absorbe los pensamientos de luz. Es por eso que conectarse con los alimentos a través del proceso de meta cognición (proceso en el que reflexionamos sobre nuestros pensamientos) nos permite reconocer los pensamientos que estamos transmitiendo.

Al momento de ingerir los alimentos, como práctica, la alimentación con atención plena puede hacernos conscientes de nuestras propias acciones, pensamientos, sentimientos y motivaciones, y darnos introspección acerca de las raíces de la salud y la felicidad. The Center for Mindful Eating (TCME) nos habla de los principios de atención plena:

Principios de Atención Plena (“Mindfulness”):

• Atención plena es poner atención deliberadamente, sin juicios, en el momento presente.
• La atención plena abarca tanto procesos internos como el entorno.
• Atención plena es estar consciente de tus pensamientos, emociones y sensaciones físicas en el momento presente.
• Con la práctica, la atención plena cultiva la posibilidad de liberarte de patrones reactivos y habituales de pensamiento, sentimiento y acción.
• La atención plena promueve el equilibrio, la elección, la sabiduría y la aceptación de lo que es.

Comer con Atención Plena (“Mindful Eating”) Es:

• Permitirte darte cuenta de las oportunidades positivas y nutritivas que están disponibles a través de la selección y preparación de alimentos respetando tu sabiduría interna.
• Utilizar todos tus sentidos para elegir comer alimentos que son tanto placenteros para ti como nutritivos para tu cuerpo.
• Reconocer las respuestas a los alimentos (si te son agradables o desagradables, o si te son neutros) sin juicios.
• Aprender a estar consciente de tu hambre física y de las señales de saciedad para guiar tus decisiones de comenzar y parar de comer.

Alguien que Come con Atención Plena:

• Reconoce que no existe una manera correcta o incorrecta de comer, sino diversos grados de conciencia alrededor de la experiencia de la comida.
• Acepta que sus experiencias al comer son únicas.
• Es un individuo que, por elección, dirige su atención a la alimentación momento a momento.
• Adquiere conciencia de cómo puede hacer elecciones que apoyen la salud y el bienestar.
• Se hace consciente de la interconexión de la tierra, los seres vivos y las prácticas culturales, y el impacto que sus elecciones tienen en estos sistemas. Gracias a los creadores de los Principios de Comer con Atención Plena.

La atención plena también se puede desarrollar al momento de evacuar, reconociendo cuantas veces al día lo hacemos, cuál es nuestro estado mental, el aspecto de los desechos, etc.

A través del autococimiento también podemos evaluar nuestra relación con los alimentos, y descubrir que en muchas ocasiones influye más nuestro estado mental al ingerir los alimentos que los alimentos en sí que estamos ingieriendo. En mi vida diaria he decidido comenzar a aplicar una serie de estrategias que me ayudan a reconocerme concientemente en relación con los alimentos y me gustaría compartirlos con ustedes.

Estrategias:

1. Cree consciencia sobre los hábitos inadecuados más arraigados que actualmente realiza.
2. Aplicar los consejos de atención plena al preparar, ingerir y desechar los alimentos.
3. Que el vegetarianismo y la alimentación orgánica nos muestre una perspectiva más amplia sobre el impacto de la alimentación en el medio.
4. Respetar los dos ciclos naturales del organismo, ciclo de asimilación y ciclo de eliminación, respetando así en qué momento el sistema está preparado para digerir y asimilar y en qué momento del día preparado para limpiar y eliminar, claro y también habla de intentar con la alimentación funcional (utilización de los alimentos como medicinas)
5. Reevalúe la forma en la que interactúa con el medio, incluyéndose a sí mismo como parte de éste.

Le deseo que siga creando conciencia de sus pensamientos y mejorando su relación consigo mismo.

Jamie Sol